Iglesia de la Asunción: edificio de planta rectangular, con cabecera recta y torre
adosada a los pies. Construida con mampuesto, reforzado con sillares en las esquinas.
Se encuentra rodeado por un patio-cementerio, al que se accede por una entrada
adintelada, con escalera de piedra. En la portada tiene un atrio con amplio arco de medio
punto, cubierto con bóveda vaida con lunetos.
Portada interior de cantería, con arco de medio punto coronado por alfiz. En las
jambas dos pequeñas columnas estriadas, en derrame. Sobre el arco, hornacina con cúpula
avenerada. A los lados de la portada sendos bancos de piedra.
La iglesia presenta cubierta de teja a doble vertiente, cubriendo también las naves
laterales, adosadas en el siglo XVII. Cornisa de arenisca y alero de teja simple.
Interiormente la nave está cubierta con bóveda de crucería estrellada, con
medallones repintados, con arcos fajones para separar los tramos, apoyados en pilastras de
capitel de hojas de acanto. Pavimento de ladrillo rojo, con restos del primitivo hecho a base
de baldosas de cerámica vidriada. En el presbiterio, altar mayor con imágenes modernas y los restos del retablo barroco que se encontraba en la capilla de la Virgen del Rosario
(columnas de fuste estriado, con dorados y decoración barroca).
En el lado derecho, se encuentran dos capillas cubiertas con cúpula sobre pechinas y
dos tramos abovedados, todos separados por arcos fajones. La primera capilla, dedicada a la
Virgen del Rosario, presentaba decoración pintada de gusto clasicista. En el arco formero,
emblema en yeso.
La segunda capilla, bajo la advocación de la Virgen de la Luz, tenía también altar con
el Niño de la Providencia. Cubierta con cúpula con tambor octogonal, sobre pechinas.
Pilastras con cornisas y cabezas de angelotes de escayola. El altar, en retranque, conserva
restos de pinturas neoclásicas, que representan posiblemente un retablo. La parte central
está reconstruida.
De la misma época son las tres capillas existentes en el lado izquierdo. La primera,
cubierta con cúpula sobre pechinas con decoración floral en yeso, es la única que conserva
restos de la antigua decoración, concentrados en las pechinas y en la pared que contenía el
retablo (emblemas enmarcados por motivos florales, medallones con escalera, etc.). En el
arco formero, emblema con hojas de acanto de yeso, dorados. Pavimento de ladrillo
vidriado.
La segunda capilla está cubierta con bóveda vaída, con lunetos. Totalmente
reformada y actualmente vacía. Estaba ocupada por la imagen de la Inmaculada.
La tercera capilla está en similares condiciones, estaba bajo la advocación de San
Pedro y las Ánimas. Cubierta con bóveda vaída.
En los pies, coro alto, con balaustrada. En el sotocoro, pila bautismal moderna, y
escalera de acceso a la torre.
La sacristía se encuentra detrás del presbiterio. Cubiertas con bóveda de cañón con
lunetos. Conserva una escalera de caracol justamente detrás del altar mayor, que lleva hasta
una estancia superior de gran amplitud, actualmente en completo abandono.
En los pies, torre de cuatro pisos, no acusados al exterior. De planta cuadrada y
cubierta a cuatro vertientes, está construida con aparejo mixto. En el piso superior, cuatro
arcos de medio punto que contienen campanas modernas. En el piso inferior vanos similares,
actualmente cegados. Alero de teja y ladrillo también reconstruido. Rematada con cruz de
forja.
La iglesia fue construida a fines del siglo XVI, de traza renacentista, pero con detalles
góticos. Según descripción que hace Sebastián de Utienes, en 1618, contenía cinco retablos
(La Asunción, de pincel y mazonería dorada; Nuestra Señora del Rosario; Cristo crucificado;
San Francisco Javier; y el altar de las Ánimas). Se remodeló a fines del siglo XVII, añadiendo las capillas laterales y el atrio. En la torre figura una inscripción con el año 1749, que quizá
indique el final de las obras. [Marta Cedón]
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